Aquí presentamos la tercera entrega de nuestra serie de actividades de interior con plantas. Asegúrate de consultar nuestras guía sobre el trasplante y la propagación de plantas, si te las has perdido.
Practicar la atención plena con las plantas, o mediante el cuidado activo de las mismas, es una de las formas de alimentar nuestro bienestar a través de la naturaleza. Este blog te ayudará a comprender qué entendemos por mindfulness, por qué es tan beneficioso y cómo las plantas pueden ayudar a cultivar un estado mental más tranquilo.
¿QUÉ ES EL LA ATENCIÓN PLENA?
Con tantos libros, aplicaciones y seminarios dedicados al tema, la atención plena puede parecer desalentador, pero en el fondo es muy sencillo. La atención plena consiste en estar en el momento presente y relajar la cabeza.
Nuestra mente revolotea constantemente entre diferentes tensiones, ansiedades y preocupaciones. Podemos pensar que estamos manteniendo una conversación, haciendo algún trabajo o leyendo un libro, pero nuestros pensamientos se han desviado en otras direcciones. Estamos repasando listas de cosas que tenemos que hacer, de tareas que no hemos hecho y de otras que nos gustaría hacer, así que mientras estamos físicamente en un lugar, nuestra mente está en otro. Esto no sólo afecta a nuestra capacidad para completar las tareas, sino que afecta a nuestras relaciones, nuestras carreras y el grado en que disfrutamos de la vida.
Cuando aprendemos a dominar nuestros pensamientos, nos volvemos mejores para dirigir y enfocar nuestra atención. Así que, aunque la práctica de la atención plena pueda parecer indulgente, a la larga puede asegurarte un uso más eficiente de tu tiempo (¡y más agradable!).
La atención plena también puede ayudarte a lidiar con la ansiedad y la depresión de bajo nivel.
Cuando somos capaces de movernos con flexibilidad entre los pensamientos, es más probable que identifiquemos los patrones destructivos y separemos las ideas inadaptadas de la realidad y de nuestro sentido del yo.
CÓMO PRACTICAR LA ATENCIÓN PLENA
Hay muchas formas de practicar la atención plena y no debería preocuparte demasiado si lo estás haciendo "bien", siempre y cuando sientas que estás trabajando para conseguir un estado mental más tranquilo.
MEDITACIÓN CONSCIENTE
Puedes reservar un tiempo para sentarte y centrarte únicamente en ralentizar tu mente, como si te prepararas para la meditación.
Si quieres empezar por aquí, te recomendamos que busques un lugar donde te sientas cómodo y libre de juicios. Busca una posición cómoda para sentarte y pon una alarma para cinco minutos (puedes aumentarla a medida que avanzas).
Siéntate en una posición cómoda, cierra los ojos y dirige tu atención hacia el interior; observa tu respiración, las sensaciones de tu cuerpo y los pensamientos que tienes en ese momento.
Poco a poco, y sin esfuerzo, deja que estos pensamientos desaparezcan y que tu monólogo interno se desvanezca.
ATENCIÓN PLENA CON ACTIVIDADES COTIDIANAS
Algunas personas consideran que la actividad anterior es una tarea demasiado ardua, o que no es para ellas.
Si la meditación no es lo tuyo, puede que descubras que puedes calmar tu mente de forma más eficaz cuando realizas actividades cotidianas, como lavar, planchar o pasar la aspiradora.
Las tareas rutinarias, como las anteriores, requieren poca atención, por lo que nuestra mente tiende a divagar. Un segundo camino hacia la atención plena consiste en centrar la atención únicamente en la tarea que se está realizando, sumergiéndose por completo en el momento presente y dejando que los pensamientos que compiten entre sí desaparezcan de la conciencia.
Tomemos, por ejemplo, una tarea rutinaria como preparar una taza de café. Para llevar a cabo esta actividad de forma consciente, tendrías que atender a todos los aspectos de la experiencia, sin analizarla ni adentrarte en tus pensamientos: podrías centrarte en el peso del café en tu mano; el olor al abrir la bolsa y el sonido de los granos cayendo en la prensa francesa, etc.
Decidir pasar por algunas partes de tu día con atención plena requiere poco tiempo y esfuerzo, y es completamente gratis, pero los beneficios para tu cabeza pueden ser enormes.
CÓMO PRACTICAR LA ATENCIÓN PLENA CON LAS PLANTAS DE INTERIOR
Las plantas de interior pueden -¡y deben! - integrarse en cualquier enfoque de la atención plena.
El simple hecho de estar en un entorno rico en naturaleza ayuda a aliviar los niveles de estrés y a relajar las mentes sobreestimuladas (lee más sobre los beneficios de las plantas aquí). Por lo tanto, crear un rincón con plantas o llenar una habitación entera con plantas te ayudará a facilitar la meditación consciente. Las señales ambientales de este tipo se han utilizado durante milenios con gran efecto, con la intención de la mayoría de las meditaciones budistas de ser uno con la naturaleza y el universo.
Integrar la atención plena con el cuidado activo de las plantas es otra pequeña forma de lograr grandes cambios en tu bienestar mental. Al igual que con la preparación de una taza de café, la idea es centrarse únicamente en el acto de cuidar las plantas y llevar la conciencia al momento presente.
Si quieres algunos consejos adicionales, utiliza estas sugerencias para empezar:
- Deja a un lado el teléfono y otras pantallas.
- Dirige tu atención al aspecto, la forma y el color de la planta, primero con los ojos y luego con las manos. - Presiona tus dedos en la tierra de tu planta, averiguando lo que necesita de ti sólo con tus sentidos.
- Respira larga, lenta y profundamente, y conecta con la relativa quietud de la(s) planta(s) que tienes ante ti.
- Inspecciona minuciosamente el follaje de tus plantas, cogiendo un trapo para limpiar el polvo y girando la planta para que absorba la luz de forma distinta.
- Saca cada planta de su maceta decorativa y vierte lentamente agua en cada maceta, escuchando el sonido del agua al hundirse en la tierra; observa cómo la tierra se oscurece y cambia de textura.
- Mientras realizas estas actividades, expresa en silencio una intención para tu planta y/o para ti mismo. Por ejemplo, "toma este alimento, crece bien y goza de buena salud".
Puedes practicar la atención plena con todas las plantas de interior, pero si buscas plantas que requieran un poco más de compromiso, prueba nuestra colección Boost.