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Si eres relativamente nuevo en el cultivo de plantas, puede que te sorprenda saber que tu rutina botánica debe incluir la fertilización de las plantas. Si este es el caso, no te preocupes, la mayoría de la gente no se da cuenta de que sus plantas necesitan fertilizarse. Hemos preparado una guía para principiantes en la que se explica cómo abonar las plantas y por qué es necesario hacerlo. Este artículo te dirá todo lo que necesitas saber.
¿Por qué hay que fertilizar las plantas?
La respuesta corta es que las plantas de interior no tendrán un aspecto tan saludable y exuberante si no se fertilizan. Es esencial que tu rutina de cuidado de las plantas de interior incluya la fertilización.
Cuando las plantas crecen en su entorno natural, tienen acceso a minerales nutritivos, vitaminas y reservas del suelo que restauran y reponen sus ciclos de crecimiento. Estas condiciones facilitan un clima de crecimiento óptimo. Cuando las plantas se colocan en maceta y se mantienen en el interior, es inevitable que empiecen a echar de menos su entorno natural.
Pero no te preocupes: aquí es donde entras tú. Si les das a tus plantas los cuidados y la atención adecuados, puedes fertilizarlas y restablecer el equilibrio mineral y vitamínico del que carecen sus suelos. Saber cómo fertilizar las plantas de interior es un gran paso para asegurarte de que tus plantas estén sanas, exuberantes y florecientes.
¿Cómo saber si tus plantas necesitan que las fertilicen?
Si nos preguntamos cómo fertilizar las plantas, la primera pregunta que deberíamos hacernos es: ¿Cuándo necesitan fertilizarse? La respuesta es complicada. Si tu planta está creciendo bien y tiene un aspecto atractivo y saludable, entonces la fertilización puede ser un buen método para mantener las cosas como están.
Si la planta de interior está marrón, quemada o enjuta, es posible que esté desnutrida, en cuyo caso también es conveniente abonarla. En resumen, no hay una respuesta correcta, pero incluir la fertilización en la rutina de cuidado de las plantas de interior es una buena manera de asegurarse de que reciban los cuidados y la nutrición que necesitan. Si puedes, fertiliza en primavera y verano para darle a tu planta las herramientas que necesita para pasar los meses más duros y fríos del año.
¿Qué fertilizante debo utilizar?
Si quieres saber cómo abonar las plantas de interior, es fundamental que conozcas los tipos y beneficios de los distintos fertilizantes. Te recomendamos que investigues e identifiques los nombres de tus plantas y sus necesidades de suelo antes de comprar cualquier fertilizante. Mientras tanto, es útil saber que hay una gama de fertilizantes disponibles, incluyendo tabletas, barras de liberación lenta, granulados y líquidos.
Recomendamos los abonos granulados para las plantas de exterior y los líquidos y de liberación lenta para las plantas de interior. Sin embargo, como alternativa a estas opciones de fertilizantes, puedes probar de utilizar tierra pre fertilizada y trasplantar tus plantas. De este modo, te aseguras de que la cantidad adecuada de nutrientes y minerales ya está presente en la tierra en la que está tu planta. Esta tierra compacta es un buen ejemplo: está compuesta principalmente por fibras de coco.
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Fertilizantes líquidos
Los fertilizantes líquidos son perfectos para las plantas de interior, porque son extremadamente fáciles de administrar y proporcionan una fuente de nutrición constante y diluida a tus plantas. Basta con verter una parte del abono líquido en la regadera y regar las plantas con normalidad. Consulta las necesidades específicas de tu planta de interior para saber con qué frecuencia debes alimentarla.
Fertilizantes de liberación lenta
Los fertilizantes de liberación lenta son otra gran opción para las plantas de interior. Como cabe esperar por su nombre, no son activos al instante. En su lugar, suelen estar recubiertos de resina plástica o polímeros a base de azufre, que se desintegran y descomponen gradualmente. El exterior protector que rodea a los fertilizantes de liberación lenta se descompone con la exposición al agua, el calor, la luz solar o la tierra, por lo que no tienes que preocuparte de hacer nada para asegurarte de que se descompongan gradualmente y proporcionen a tus plantas los nutrientes que necesitan.
Fertilizantes granulados
Estos fertilizantes son gránulos secos de abono sin diluir. Suelen mezclarse con el abono o la tierra de las macetas de exterior, ya sea a mano o con una pala. Es posible utilizar fertilizante granulado en las plantas de interior, aunque puede resultar difícil remover y mezclar los gránulos con la tierra. Además, los nutrientes se liberan en cuanto se riega la planta. Esto significa que no siempre es posible crear un sistema de liberación gradual y controlada.
¿Con qué frecuencia debo fertilizar las plantas?
La respuesta a esta pregunta dependerá de las necesidades específicas de las plantas. Cada planta requiere un tipo de suelo distinto y, por tanto, una rutina de fertilización diferente. Algunas plantas requieren más mantenimiento y necesitan más abono que otras. La frecuencia con la que se debe fertilizar puede determinarse consultando la etiqueta de cuidados de la planta o investigando cada planta en particular.
Como regla general, te recomendamos que intentes fertilizar tus plantas de interior una vez cada 2 y 12 semanas, dependiendo de las instrucciones de cuidado particulares de la planta que tengas. El abono debe añadirse a la tierra durante el ciclo de crecimiento máximo de sus plantas. Puedes saber cuándo es esto porque será el periodo en el que tu planta está creciendo, produciendo nuevos tallos y hojas, o floreciendo. Esto suele ocurrir en primavera.
CÓMO FERTILIZAR LAS PLANTAS DE INTERIOR
REVISA EL SUELO Y EL PH
Con un kit de análisis del suelo, comprueba el pH de la tierra de tus plantas. El pH es una escala que sirve para determinar la acidez o la alcalinidad del suelo. La mayoría de las plantas de interior necesitan un pH de 6,0-7,0, es decir, un pH más o menos neutro. Las plantas como la azalea, los pinos y los abetos requieren un suelo ácido de 4,0 pH.
Investiga un poco y averigua exactamente qué acidez de suelo requiere tu planta. Si tu kit de análisis del suelo da como resultado que es mucho más ácido o alcalino que el nivel que deseas, entonces puedes elegir un abono que te ayude a reequilibrar y así restablecer la neutralidad del suelo de tus plantas. Una vez que el suelo tenga el nivel de pH adecuado, a tu planta le resultará mucho más fácil absorber los minerales y nutrientes de la tierra en la que está plantada.
ELEGIR EL FERTILIZANTE ADECUADO
Ya te hemos dado una idea de los diferentes tipos de fertilizantes disponibles, desde los líquidos hasta los de liberación lenta y los granulados. Una vez que sepas cuál de ellos utilizarás, verifica el etiquetado específico del abono. Será algo así como 5-5-5 o 10-10-10, que refleja que el fertilizante tiene la misma cantidad de cada ingrediente clave (nitrógeno, fosfato y potasio). Si has investigado sobre tu planta y has comprobado el suelo y el pH, deberías ser capaz de averiguar cuál es el abono adecuado para tu planta. También puedes pedir ayuda en una tienda o centro de jardinería, y un asistente te ayudará.
FERTILIZA LAS HOJAS DE TU PLANTA
Algunas plantas pueden absorber una gran cantidad de nutrientes a través de sus hojas. Investiga y averigua si tu planta es una de las que se benefician de la fertilización foliar.
Algunos abonos pueden provocar quemaduras en las hojas o fitotoxicidad. Si vas a fertilizar las hojas de tu planta, es mejor que lo hagas con un abono foliar, para evitar daños.
FERTILIZA LAS RAÍCES DE TUS PLANTAS
Uno de los principales consejos que tenemos a la hora de abonar las plantas es que debes priorizar el cuidado de las raíces, y asegurarte de fertilizarlas. Añade el abono a la tierra húmeda cuando vayas a plantar o trasplantar. También puedes probar a añadir estiércol, compost o lombrices a la tierra como fertilizante natural.
¡Y eso es todo!
Esperamos que este artículo haya sido una guía útil sobre cómo fertilizar las plantas de interior. Cuando se trata de abonar las plantas, todo depende de la especie y el estado de la planta que se cuida. Hay reglas y directrices generales que hemos intentado especificar, pero en general, cuanto más investigues y mejor conozcas cada planta en particular, más éxito tendrá el cuidado de tus plantas de interior.
Esta artículo fue publicado por Costas Hadjipateras en Noticias
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