Con los días cortos y las noches largas, muchos de nosotros empezamos a sentir la depresión invernal. La falta de luz del día y el frío, hace que pasemos mucho tiempo dentro de las habitaciones con calefacción y menos tiempo disfrutando del aire libre y del aire fresco.
Aquí es donde resulta útil rodearse de plantas. Las plantas son hermosas, pero sus beneficios van mucho más allá de la estética.
Purificación del aire
Las investigaciones de la NASA realizadas en los años 80 demostraron que las plantas pueden reducir los niveles de contaminantes como el benceno, el formaldehído y el monóxido de carbono. Estos se encuentran en una serie de artículos domésticos como el papel tapiz, la tapicería y los productos de limpieza, por lo que pasar más tiempo en el interior significa estar rodeado de estas sustancias químicas. Las plantas de interior reducen los niveles al respirar las toxinas junto con el dióxido de carbono, y luego lo devuelven al aire en forma de oxígeno. Una bocanada de aire fresco siempre ha sido la forma más sencilla de levantar el ánimo.
Humedad
Los niveles de humedad descienden durante los meses de invierno, ya que mantenemos la calefacción encendida. El aire seco puede ser perjudicial para nuestra piel y nuestros ojos, ya que reseca las capas externas y provoca molestias. Pero los bajos niveles de humedad también pueden ser perjudiciales para nuestra salud: los estudios han demostrado que los resfriados son más comunes en las personas que pasan más tiempo en habitaciones secas. Las plantas aumentan los niveles de humedad al liberar agua a través de sus hojas; cuanto más grandes son las hojas, mejor es la planta en este sentido. Como los resfriados tienen un efecto perjudicial en nuestro estado de ánimo, las plantas son una buena forma de estar más felices.
Sentimientos
Varios estudios han demostrado que las personas se sienten mejor cuando están rodeadas de naturaleza. Incluso el simple color verde puede levantar nuestro ánimo. Es una necesidad innata que tenemos de conectar con la naturaleza. El mero hecho de sentarse en una habitación con plantas puede mejorar nuestro estado de ánimo y nuestra positividad. Pero incluso más allá de esto, las plantas pueden reducir nuestros niveles de cortisol, ayudándonos a relajarnos. Los estudios han demostrado que la reducción de las hormonas del estrés se produce cuando las personas están en una habitación con plantas, aunque estas no les hayan llamado la atención.
Consulta - ¿Cómo te ayudan las plantas a reducir el estrés?
Alimentar
Por último, pero no por ello menos importante, el acto de nutrir a un ser vivo nos produce satisfacción. Cuidar de una planta provoca una atención al presente, un "mindfulness". Nos hace volver a la tierra y nos devuelve a lo básico, un bienvenido respiro de nuestras vidas cargadas de tecnología. El acto de cuidar algo nos obliga a su vez a cuidarnos a nosotros mismos. Cuidar de un ser vivo nos da un propósito y es enormemente gratificante, sobre todo cuando vemos que ese ser vivo prospera.