Un lugar adecuado para tu pequeña planta

No importa si estás empezando a explorar las plantas para tu hogar o si ya eres un amante de las plantas: hay una planta para cada persona. Si te gustaría tener algo de verde en tu casa pero con pocos requisitos de mantenimiento, entonces un cactus espina de pescado sería una gran opción. Estas plantas crecen bien en un espacio cálido y solo tienes que regarlas cuando la tierra está bastante seca. Con sus tallos de forma extraña, es un cactus poco habitual.

Aunque nuestras pequeñas plantas de interior ocupan menos espacio, suelen ser más sensibles a los cambios. Esto significa que estas mini plantas son más susceptibles a las sequías o al sol intenso que sus hermanas mayores. El primer paso importante para cuidar tu planta es elegir un lugar con las condiciones de luz, humedad y temperatura adecuadas. Pero cada planta es diferente, así que aquí tienes una breve guía para ayudarte a elegirlas.

No importa el tamaño: Beneficios para el cuerpo y la mente

Lo que hace que las plantas sean un complemento tan especial para tu hogar es que benefician enormemente tu bienestar. No sólo son bonitas, sino que el cuidado de una planta también se traduce al cuidado de uno mismo tarde o temprano. Ellas nos hacen comprender que nosotros también formamos parte de la naturaleza.

Además de estos beneficios para tu mente, también hay ciertos beneficios para tu cuerpo. Las plantas ayudan al cuerpo mejorando la calidad del aire y la humedad. Cuando las plantas "respiran" a través de sus diminutos poros, absorben los gases tóxicos. Al hacerlo, menos de estas sustancias nocivas entran en nuestro sistema respiratorio. Estos beneficios varían según la planta de que se trate.

Humedad

Muchas de las pequeñas plantas de interior que ofrecemos proceden de entornos tropicales. Algunas de estas plantas de la selva tropical actúan como humidificadores naturales. Basta con mantenerlas bien regadas y húmedas para que transpiren. Especialmente durante los inviernos, cuando la calefacción crea sequedad en el aire, las plantas como la areca ayudarán a equilibrar la humedad.

Reducción del estrés y relajación

Cuidar de tu pequeña planta puede forjar una conexión especial. Formar parte del mundo natural es algo que muchos olvidamos en nuestro frenesí diario. Tener una planta de interior en un espacio en el que se trabaja con frecuencia, como un escritorio, puede ser un recordatorio de nuestra pequeña presencia en el mundo exterior. Esto ayuda a aliviar el estrés, ya que tomamos una perspectiva diferente y nos damos cuenta de nuestra importancia en el plano general.

Y si crees que el cuidado de las plantas es sólo una tarea más, es hora de romper ese mito. El principal beneficio del que hablará cualquier amante de las plantas es la gran satisfacción de verlas crecer. Cuando veas que los ramilletes de tu cola de zorro se hacen más largos y tupidos, no podrás evitar sentir una sensación de felicidad. Los frutos de tus cuidados se hacen visibles y no se puede negar que estás haciendo las cosas bien. Así que aprovecha este incentivo para tu autoestima.