Mis recompensas
La oficina estándar no podría estar más alejada del paisaje natural. Estéticamente mínimos en cromo y acero, nuestros espacios de trabajo urbanos son totalmente opuestos a los entornos a los que se adaptó el ser humano. Asociamos estos entornos racionalizados y artificiales con la industria y el progreso, pero ¿son estas condiciones óptimas?
Investigadores, diseñadores e innovadores se están dando cuenta de los beneficios de hacer más verde el espacio de trabajo, con pruebas de todo el mundo que demuestran que los niveles de productividad aumentan con la vida vegetal. Una investigación empírica de la Universidad de Exeter cifró este aumento en un 15%, mientras que estudios de Harvard constataron un incremento del 26% en el rendimiento de los trabajadores en oficinas verdes.
El primer proyecto supervisó oficinas en el Reino Unido y los Países Bajos durante un largo periodo de 18 meses. Los edificios fueron emparejados y se les asignó al azar interiores "minimalistas" o "maximalistas", con énfasis en la vida vegetal en la segunda categoría.
El Dr. Knight, director del estudio, afirma que "lo importante era que todo el mundo pudiera ver una planta desde su escritorio. Si trabajas en un entorno en el que hay algo que te engancha psicológicamente, eres más feliz y trabajas mejor".
Las ventajas de trabajar entre plantas van más allá de lo visual, como ha demostrado el proyecto Impact of Green Buildings. El experimento evaluó múltiples factores que afectan a los lugares de trabajo interiores, modificando cualidades como los componentes químicos del espacio aéreo y los niveles de ventilación. Descubrieron que el entorno más parecido a una oficina con vida vegetal aumentaba la función cognitiva en un grado significativo. Los participantes en el entorno verde mostraron una mayor capacidad de pensamiento estratégico, almacenamiento y uso de la información, y respondieron a las tareas con mayor facilidad.
Y lo que es más interesante, un estudio realizado en la Universidad Estatal de Washington demostró que un entorno sin ventanas con plantas produce trabajadores más productivos y menos estresados que una habitación con ventanas que dan a la naturaleza.
¿Por qué ocurre esto?
Al parecer, las razones por las que las plantas aumentan nuestros niveles de productividad y estado de ánimo son tanto psicológicas como fisiológicas. Estos resultados de la investigación nos recuerdan nuestra afinidad innata con el mundo natural.
Para una explicación más detallada de las razones por las que respondemos bien a los entornos verdes, estate atento a las próximas publicaciones del blog.
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